Limpieza de sofás

¿Cansado de ver tu sofá o sillón sucio y no saber ni por dónde empezar? ¡Tranquilo, no eres el único! Limpiar estos muebles sin volverse loco (y sin estropearlos) puede parecer un enigma, pero con unos sencillos consejos podrás dejarlos como nuevos.

¿Por qué es tan importante mantenerlos limpios?

Tus sofás y sillones acumulan de todo: miguitas de las meriendas, pelos de mascota, polvo… y hasta bacterias y ácaros que pueden causar irritaciones en la piel, asma o alergias. Además de que dan una imagen mucho más cuidada, una buena limpieza protege tu salud.

Elige bien según el tapizado

Antes de ponerte manos a la obra, identifica el material:

Piel: se limpia fácil (¡adiós al polvo!), pero es más delicada, rasguños incluidos.

Tela: resiste mejor el uso diario, pero las manchas pueden ser su gran enemigo.

¿No te decides? ¡Nuestros sofás antimanchas y antiarañazos son la solución perfecta! Un tejido súper suave con tecnología de última generación para que disfrutes sin preocupaciones.

Limpieza de un sofá de tela

Mantenimiento semanal

Pasa la aspiradora con boquilla de tapicería.

Quita cojines y no te olvides de rincones como reposabrazos, cabezales y patas.

Limpieza a fondo

Si se puede desenfundar: quita las fundas y mételas en la lavadora a 30 °C, ciclo delicado. ¡En menos de una hora estarán listas!

Si no se desenfunda: Primero, cepilla con suavidad para eliminar la capa de polvo.

Para las manchas, haz una prueba en un rincón poco visible: frota un poco de jabón de Marsella, espera 10 min y pasa un paño húmedo bien escurrido.

Si aún hay rastro, prueba con vapor (poco a poco, sin empapar el relleno) y evita a toda costa productos químicos agresivos.

Limpieza de un sofá de cuero

Diario: aspira con cuidado usando un paño o boquilla suave.

Manchas: Humedece un algodón con tu limpiador facial suave (sí, esa leche desmaquillante funciona de maravilla).

Luego, aclara con un paño húmedo y suave.

Para las más rebeldes, ¡prueba con una goma de borrar!

Tip final: siempre usa paños suaves. El cuero y los materiales delicados te lo agradecerán.

Con estos trucos, tu sofá o sillón quedarán relucientes sin complicaciones. ¿Te animas a probarlos este fin de semana?

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